La aproximación fenomenológica hacia la arquitectura popular supuso, a mediados de los años 30, un enfoque novedoso que se posiciona frente al Movimiento Moderno reivindicando el valor físico y social de lo construido. Desde el contexto internacional de los C.I.A.M – Congreso Internacional de Arquitectura Moderna- se reclamó la validez de lo tradicional heterogéneo frente a cualquier tipo de homogeneidad disciplinar.

La relectura de lo pre-existente puso en valor lo heredado de la actividad constructora continuada en el tiempo, conformando un cuerpo teórico en el que las características constructivas y tipológicas mediterráneas multiplicaron su influencia en el ámbito arquitectónico europeo. Arquitectos españoles en contacto con aquel contexto internacional formaron parte junto a europeos del impulso reivindicador de la sabiduría de la arquitectura popular mediterránea y vernácula.

Uno de los puntos de inflexión de esta nueva mirada hacia lo construido anónimo se encuentra en el IV Congreso del C.I.A.M. que tuvo lugar a bordo de barco “Patris II” en una travesía de Marsella a Atenas en el verano de 1933.

Los lugares contemplados en aquella travesía por el Mediterráneo fueron, sin pretenderlo de antemano, el catalizador de una relectura de los sistemas arquitectónicos tradicionales que supuso un cambio de rumbo respecto a los axiomas modernos establecidos hasta el momento. Se inició una vertiente inexplorada al subrayar lo aprendido de las constantes de la arquitectura mediterránea popular. La idea era alejarse en forma y fondo de los postulados más tecnicistas de la arquitectura moderna del norte, que según Le Corbusier habían hecho olvidar el lirismo acertado de la buena construcción mediterránea que combinaba técnica y forma.

Los propios representantes españoles en aquel congreso José Luis Sert, José Torres Clavé y Ricardo Ribas reconocían el papel destacado de las visiones desde el sur en la revista AC “…los elementos de los grupos latinos tienen en este congreso mayor importancia que los anteriores; estamos casi en mayoría y navegamos en el Mediterráneo. Esto explica muchas diferencias entre el IV Congreso y los anteriores…”. Y ellos mismos en el artículo Raíces Mediterráneas de las Arquitectura Moderna relatan su descubrimiento: “La arquitectura moderna, técnicamente, es en gran parte un descubrimiento de los países nórdicos, pero espiritualmente es la arquitectura mediterránea sin estilo la que influye esta nueva arquitectura. La arquitectura moderna es un retorno a las formas puras tradicionales del Mediterráneo. ¡Es una victoria más del mar latino!”

En una posterior evolución de la arquitectura moderna también en corrientes, tanto teóricas como prácticas, vinculadas con el lugar, como por ejemplo las vertientes organicistas y toda la revisión del lenguaje ortodoxamente moderno se produjo a partir de los años 50 con nuevos conceptos del hábitat, pone de manifestó y ahonda en la idea de la relación de las condiciones contextuales en la producción arquitectónica.

En este marco teórico y práctico se introduce la temática del Congreso con la intención de difundir investigaciones que aborden el particular desarrollo de la arquitectura moderna en España bajo el análisis de la vinculación de la misma con el medio.

OBJETIVOS

Con el objetivo principal de abordar los diversos y muy diferentes aspectos que hacen de la arquitectura moderna española un paradigma de relación con la arquitectura popular mediterránea se proponen alcanzar una serie de objetivos concretos como:

– Comprobar a través de una visión contemporánea de la arquitectura el distanciamiento de la misma de modelos internacionales de carácter autónomo e independientes del medio de inserción atendiendo a la recuperación de los valores del lugar.

– Lograr una catalogación de los sistemas materiales y espaciales modernos fruto de la reinterpretación de los valores tradicionales de la arquitectura del lugar.

– Realizar la puesta en valor de la continuidad y concatenación de hechos arquitectónicos que permiten construir un lenguaje moderno basado en una paulatina transformación de los sistemas históricos. La arquitectura moderna como espacio continuo en la relectura de la Historia.

– Realizar una lectura del lugar para lograr implementar una mayor comprensión del mismo, ampliando el concepto patrimonial arquitectónico vinculando a la sociedad de un territorio y su contexto.

– Catalizar la sensibilización por lo autóctono que define la memoria colectiva de la sociedad y por tanto con capacidad para construir un legado a generaciones futuras.

– Difundir los resultados de las investigaciones como aportación al concepto de patrimonio cultural.

– Recuperar los valores intrínsecos del lugar como forma de hacer y proyectar el futuro, cimentado en la actualización y contemporización de la tradición.